En el imaginario colectivo de las y los mexicanos, ya existe una fuerte relación entre septiembre y los sismos, pues ya llevamos 3 años diferentes, 1985, 2017 y 2022, con terremotos en el mismo día: 19 de septiembre.[1]
Pero de acuerdo a estudios del Servicio Sismológico Nacional, septiembre no es el mes con mayor actividad sísmica, pues según sus registros históricos recopilados durante más de 111 años, en realidad el mes con más sismos es diciembre [1], mes en que los movimientos telúricos pareciera que pasan a un segundo plano porque son 31 días cargados de festividades.
¿Y esto tendrá relación con la valuación inmobiliaria? Pues sí. Y no solo los sismos, sino todos los fenómenos naturales. En primera instancia, por los daños físicos que estos eventos pueden generar en los inmuebles, tanto así que diferentes normas consideran el “Principio de temporalidad” para la vigencia de los avalúos. Ejemplo de ello son Reglas de Carácter General que establecen la metodología para la valuación de Inmuebles Objeto de Créditos Garantizados a la Vivienda que indican que este principio “reconocerá seis meses de vigencia siempre que no cambien las características físicas del inmueble” [2]
Pero la otra manera en que los sismos se relacionan con la valuación inmobiliaria es en el análisis de riesgos. Cabe aclarar que los riesgos son muchos y de diversos tipos. De acuerdo a Victor Pomar, existen riesgos de tipo económico, relacionados con la depreciación de la moneda, con que el deudor o la contra-parte de un contrato financiero no cumplan con las condiciones del mismo, con los movimientos en los precios de mercado, o incluso con la destrucción del inmueble. También existen los riesgos por toma de decisiones políticas, como la expropiación o los cambios de uso de suelo, polígonos de actuación o mejoras urbanas relacionadas con transporte público. Los riesgos de tipo social, como el vandalismo, invasiones o incluso que se usen los inmuebles para actos ilícitos y por último los riesgos de tipo ético, que son los sobornos y fraudes cometidos por alguna las partes que integran el ecosistema del crédito inmobiliario. [3]
Y si bien el análisis del riesgo en la valuación inmobiliaria es algo muy complejo y que conjunta un sinnúmero de posibilidades, la idea general es “traducir” esos riesgos en un monto económico. Y para ello se requiere conocer y entender la probabilidad objetiva de que el evento suceda y analizar las posibles afectaciones que pueda tener el inmueble. Esto también se traduce en el monto de la inversión que se debería hacer para afrontar y reparar los posibles daños en los inmuebles involucrados lo que, retomando el tema de los sismos, relaciona la posibilidad de que ocurra un sismo, de que éste afecte al inmueble y el monto económico que necesitarías para subsanarlo.
Y esta traducción se puede observar en múltiples documentos, como un avalúo para aseguramiento, en el valor destructible de un inmueble o algo mucho más complejos como un análisis de riesgos financieros por sismo. Recuerda que si necesitas hacer un análisis de este tipo, en Corporación Mexicana de Valuación estamos para apoyarte.
Las posibilidades de que tiemble son muchas, México es un país que se encuentra entre 5 placas tectónicas, pero los sismos no se pueden predecir. Por ello es necesario estar preparados.
Así que, recuerda contratar un buen seguro de vivienda y considerar las siguientes medidas preventivas ante un sismo:
- Antes del sismo: Desarrolla un plan de evacuación, identifica zonas seguras en tu hogar, y revisa regularmente las instalaciones de gas y electricidad. Mantén una mochila de emergencia con elementos esenciales.
- Durante el sismo: Mantén la calma, busca una zona segura lejos de ventanas y objetos que puedan caerse. Si estás en un automóvil, estaciónate en un lugar seguro. En zonas costeras, aléjate de la playa ante el riesgo de tsunamis.
- Después del sismo: Revisa tu hogar por daños estructurales, utiliza el teléfono solo en emergencias, y mantente informado a través de fuentes oficiales. Recuerda que pueden ocurrir réplicas, por lo que es importante seguir alerta. [1]
Una cultura de la prevención siempre funciona ante cualquier evento disruptivo que nos pueda pasar, y como seres humanos que habitan en ciudades tan grandes y complejas, tenemos que estar preparados. Y recuerda, tu cooperación es muy importante para que todas y todos estemos lo más seguros posibles.
Referencias:
[1] UNAM Global [2024] “Los sismos del 19 de septiembre: una coincidencia histórica que nos invita a estar preparados” Consultado en:
https://unamglobal.unam.mx/global_revista/los-sismos-del-19-de-septiembre-una-coincidencia-historica-que-nos-invita-a-estar-preparados/
[2] SHF (2004) Reglas de Carácter General que establecen la metodología para la valuación de Inmuebles Objeto de Créditos Garantizados a la Vivienda. Consultado en:
https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/127541/05.Reglas_de_Car_cter_General_que_establecen_la_Metodolog_a_para_la_Valuaci_n_de_Inmuebles_Objeto_d e_CrC_ditos_Garantizados_a_la_Vivienda__DOF_27-septiembre-2004.pdf
[3] Pomar Pérez, V. (2013) el riesgo por sismo y la valuación inmobiliaria. Consultado en:
https://ru.dgb.unam.mx/server/api/core/bitstreams/8f21d2f2-0671-469f-a607-e399fb775cee/content